Showing posts with label Revolución. Show all posts
Showing posts with label Revolución. Show all posts

Tuesday, 27 August 2013

Long Day

¡Qué día! Tener que lidiar con gente que o no quiere hacer su trabajo y piensa que es tu obligación que tú se lo hagas, o lo hace mal, a medias o con pésima actitud; además de tener que lidiar con normas absurdas que sólo existen para permitir que los "servidores" públicos puedan ganarse un sueldo haciendo el mínimo esfuerzo...

"¿Necesidades del cliente/usuario? ¡Por favor! Si sólo son la razón de ser de mi empleo, ¿crees que por eso me va a a importar cumplir con mis responsabilidades?"
"¿Deber ético? Jajaja. No estoy familiarizado con el término..."
En una palabra: ineptitud (sea por actitud negativa, por la corrupción del "poder" -o lo que la gente mezquina cree que es poder- o simple arrogancia -nacida de la ignorancia y de la ambición-.
Al menos todo parece ir mejor para mi madre y para su salud. 

Thursday, 18 July 2013

so you want to be a writer?

Actually I like Rilke's way of saying it better, but mmm, this is like, very I don't know visceral ;)

"¿Así que quieres ser escritor?" por Charles Bukowski
(Traducción: Luz Mar Orozco Márquez)

si no sale de ti a borbotones
a pesar de todo,
no lo hagas.
a menos que salga libremente
de tu corazón y de tu mente y de tu boca
y de tus entrañas.
si tienes que sentarte por horas
mirando la pantalla de la computadora
o encorvado sobre tu
máquina de escribir
buscando las palabras,
no lo hagas.
si lo haces por dinero o
fama,
no lo hagas.
si lo haces porque quieres
mujeres en tu cama,
no lo hagas.
si tienes que sentarte ahí y
reescribir una y otra y otra vez,
no lo hagas.
si te cansa el sólo pensar en hacerlo,
no lo hagas.
si estás tratando de escribir como
alguien más,
olvídalo.

si tienes que esperar a que salga rugiendo
de ti,
entonces espera con paciencia.
si nunca sale rugiendo de ti,
haz alguna otra cosa.

si tienes que leérselo primero a tu esposa,
o a tu novia o a tu novio,
o a tus padres o a cualquier persona,
no estás listo.

no seas como tantos otros escritores,
no seas como tantos otros miles de
personas que se autonombran escritores,
no seas soso ni aburrido ni
pretencioso, que no te consuma la
arrogancia.
las bibliotecas del mundo han bostezado,
se han dormido por gente de esa clase.
ya no añadas más.
no lo hagas.
a menos que salga de tu
alma como un cohete,
a menos que no hacerlo te lleve
a la locura o al suicidio,
o al asesinato,
no lo hagas.
a menos que el sol dentro de ti
te queme las entrañas.
no lo hagas.

cuando de veras sea tiempo,
y si has sido elegido,
lo hará por sí solo y lo seguirá haciendo
hasta que mueras, o muera en ti.

no hay otra manera.

y nunca la hubo.

 

Read the original here

Monday, 13 June 2011

Last try to break the code / A silent virus takes control

Últimamente he pensado en los usos populares de la high-tech y los lamentables resultados que han provocado. Casi a diario tengo que bajar la mirada y negar con la cabeza pensando "brr, ¿para esto se usan las grandes conquistas de la humanidad, etc." Y no quiero satanizar a la tecnología al sentido anarco-primitivista ni nada por el estilo, porque yo la uso y la disfruto, y aún más, porque gracias a ella he tenido acceso a materiales y aprendizajes que de otro modo jamás hubiera podido tener cerca. (Un ejemplo rápido: mi gusto por la literatura inglesa y francesa se vio alimentada por las muchas traducciones -buenas, malas- a las que pude tener acceso a través de internet y sobre todo, a los textos originales que pude encontrar en la red, en un tiempo en el cual comprar libros importados estaba total y absolutamente fuera de mi alcance por motivos financieros.)

Y aún con todo, en ciertos momentos pienso que la tecnología no ha creado nuevos vicios (como algunos señalan) sino que sólo ha acentuado la presencia de los ya existentes, los ha hecho evidentes, los ha difundido.

Recuerdo que cuando estudiaba en el cch, (años curiosos de mi vida, sin duda, en los cuales pasé de una "vocación" a otra, donde aprendí bastantes cosas, etc...) la mayoría de mis compañeros solían llevar una vida bastante disoluta, abundante en alcohol, drogas y sexo, en ocasiones ilícito, y otras tantas, simplemente degradante. Las historias que se contaban entre clases y durante ellas eran las únicas formas de enterarse de estos escándalos, pero ahora, según puedo escuchar por amigos más jóvenes y notas en la prensa, este estilo de vida continúa y ahora está documentado en videos, fotografías, comments, etc. Siento que lo molesto del problema es lo evidente que se ha vuelto, porque nos señala que durante mucho tiempo la moralidad ha estado ausente en absoluto de la educación y la opinión pública. ¿Disciplina? Para nada... El problema no lo causa la tecnología pero así nos gustaría pensarlo.

Por otro lado, leyendo acerca de la marcha en contra de la violencia de género en la ciudad de México, fue triste notar que pasó de hacer uso de la ironía a ser una ironía en sí misma. Las pancartas y consignas mencionaban frases sexistas o de corte ofensivo contra las mujeres, y sin embargo, varios de los asistentes (o transeúntes que pasaban por ahí), haciendo uso de la tecnología parecía que practicaban literalmente las sarcásticas consignas.

Dos casos en los cuales el problema es más profundo que el de "la high-tech está ablandándonos los cerebros" (lo que sin duda, y en cierta manera, fisiológica sobretodo, puede ser verdad). Dos casos ante los que pienso, "seguro, la gran mayoría de la gente no está lista ni moral, ni ética, ni emocional, ni intelectualmente para el uso masivo de la tecnología". Todo depende del uso, pero ése es justo el problema, quizá en condiciones ideales estaría fuera de la existencia. De vuelta al mundo real, “que mal, está aquí para quedarse pero parece que no es más que una colección de cosas deplorables”.

Por cierto, me parece increíble que Orwell y las distopías le hayan atinado al hecho de que la pérdida de la privacidad sería el signo de la total decadencia… Me parece aún más increíble que, en la realidad, no haya sido un sistema totalitario el que nos haya despojado de nuestra privacidad, sino que los mismos ciudadanos son quienes la entregamos, la regalamos, la olvidamos, nos da igual, nos encanta que no exista… Así ya no me suena .tan extraño eso de que “la tecnología no es una herramienta es un sistema” y nosotros quisiéramos ser sus engranes pero somos más o menos sus esclavos, ¿no? (Uh, dos rayitas menos, por favor, jaja)

Y que los grandes magnates se sigan peleando con el negocio multibillonario que la high-tech reporta, los ciudadanos de a pie siempre somos los que en balance, perdemos más de lo que podemos ganar.

Monday, 30 May 2011

Libertad de decisión… ¿una farsa…?

 

"When the highwayman holds his gun to your head you turn your valuables over to him. You "consent" alright, but you do so because you cannot help yourself, because you are compelled by his gun. Are you not compelled to work for an employer? Your need compels you, just as the highwayman's gun."

Alexander Berkman
(1870-1936)

Friday, 22 April 2011

Demasiado esfuerzo

¿Es posible esforzarse demasiado? Seguro, o al menos en ciertas cosas, en ciertas situaciones, con ciertas personas.

Muchos dicen que hay que dar el 110% o entregarse al 200%, pero ¿qué diablos quieren decir con eso? ¿Se presupone un 100% en el que tú haces todo lo que te corresponde o en el que haces todo lo que necesita hacerse? El segundo concepto suena a un muy mal negocio, y el primero suena a que ese 100% no es sino una manera optimista de referirse a un 50%, 25% u otro porcentaje de la actividad considerada (esto dependiendo de cuántas personas o elementos estén involucrados en la consecución del hecho en sí).

Así que tal vez dar el 100% sea dar el esfuerzo correcto, tal vez sea dar un poco más, tal vez un poco menos, no lo sé...

Pero creo que sí es posible esforzarse de más, forzar un poco las cosas, y cuando se tiene tanto entusiasmo y tantos ánimos de que algo suceda, es fácil que esta idea suene como un muy buen plan, como "lo correcto". Sin embargo, sí es un poco (o un mucho) absurdo el estarse desgastando cuando no deberías hacerlo, cuando a la persona por quien estás desgastándote le da igual, es más, ni siquiera nota que estás haciendo un esfuerzo (sea grande o pequeño, ¿hay tamaños en los esfuerzos?). Piensas y dices "ok, vayamos a este lugar que no me agrada del todo, o hablemos de esto que no me interesa del todo, seamos comprensivos, cedamos, porque las cosas nunca pueden ser tal y como a nosotros nos gustarían, siempre hay que poner de nuestra parte, construyamos familiaridad poco a poco,  etc., etc.,"  y los demás actúan como si fuera tu obligación esforzarte, ceder, comprender, dar de ti. Por si fuera poco, no te puedes quejar porque "¿quién te manda a dar de más? Si lo haces hazlo de buena gana y no te quejes o no lo hagas..." Resulta que la comprensión y la "buena onda" te atraparon y para donde le muevas te va mal.

Pues, váyanse al diablo, en buen plan, o al menos no manden mensajes equivocados de “esto podría funcionar”, “me interesa”, “es bueno hablar contigo”, “me pasé un momento chido”, “déjame te llamo”, “¿qué piensas de tal o cual?”, porque todo eso parece apuntar a que los esfuerzos permitirán construir algo, una verdadera conexión. Así que si no tienen esa intención no actúen como si la tuvieran. Chance y están más interesados en desgastarse con quien no lo nota que con quien se desgasta con ustedes, ¿no?  Ya sé que, como decía Goethe, es difícil actuar de forma congruente, pero en serio, no sean crueles  e inténtenlo, es más honesto…

Wednesday, 13 April 2011

Don’t know what my mind is made of (but I don’t need to, maybe…)

Hoy, después de mediodía, tuve una especie de epifanía. No fue tan intensa como otras que he tenido, pero por eso mismo, creo que fue bastante razonable y lógica. Tenía una cita médica a eso de las 11:30 am, pero como ya se sabe cómo son los médicos, pasé a consulta casi a la 1 pm. Brrr... Y sólo para escuchar la conocida sarta de diatribas contra las humanidades, "la cultura" y contra todos los que nos dedicamos a ellas de una u otra forma. Por un momento pensé, "bueno, pero, ¿qué diablos? ¿estoy pagando mil pesos para que una profesional de la salud me haga sentir mal con sus creencias acerca de temas que desconoce?" Pareciera que así es... Y de inmediato cerré la boca porque no quería causar conflicto y también porque hablarle de empatía a un médico es como hablarle a una piedra esperando que te entienda y cambie su actitud. (¿Quién es el loco ahí? No creo que la piedra…) Recordé que los médicos probablemente piensan que su profesión/carrera es la única que vale la pena en el mundo, la única que tiene sentido, y que todos los demás que nos dedicamos a otra cosa somos unos pobres idiotas que perdemos nuestro tiempo con banalidades. Nos miran con esos ojitos burlones brillantes de satisfacción como diciendo “yo tengo las llaves del mundo y tú no tienes nada…”

Y entonces sentí algo dentro de mi mente y de hecho, en todo mi torrente sanguíneo, ánimo de hacer algo en este campo en el que estoy, al que le he dedicado tanto tiempo a lo largo de varios años, y hacia el cual ciertas cosas me han arrastrado, a pesar de todos los rodeos que he hecho para escaparme de él. ¿Por qué habría de abandonarlo antes de descubrir por qué estoy aquí? ¿Por qué no podría hacer algo que fuera importante, interesante, que sirviera como argumento de por qué "las artes", "la cultura", "las humanidades" "la literatura" son importantes, tan importantes como cualquier otra cosa que se considera "realmente importante" por el común de los ciudadanos?

A donde quiera que he volteado me he topado con muchas personas que tienen esta misma idea equivocada respecto a los campos de estudio "no rentables", "no modernos", "intelectuales"; y después, cuando miras los contextos en los que esta clase conocimiento se desarrolla, te das cuenta que quienes deberían cultivarlo y defenderlo, son académicos que tienen miles de vicios que no hacen sino alimentar estas creencias erróneas... Un círculo vicioso... Pero el hecho de que esta gente no cultive el conocimiento y le dé mala fama no es culpa del campo de estudio... Y aún así, a los humanistas, todos, especialmente los que no saben de lo que hablan, nos quieren decir que y qué hicimos mal...

Hace unos días escribí algo así de "I had so much potential but I'll end up unhappy"... Brrr, ¿Por qué? ¿Por qué por el momento estoy yo frente a la inercia en mi cruzada por conocimiento? ¿Por qué el campo de trabajo literario es baldío y auto-limitante aunque el campo de conocimiento sea vasto y valioso? ¿O es porque no uso mi tiempo para "salvar vidas" o  para hacer "cosas rentables"? Brr, tengo una buena mente, una mente aguda, es una lástima que quienes debieron darse cuenta de ello nunca lo hayan hecho, o que a quienes deberían apoyarme no les interese... Pero yo, aún así, debo hacer algo antes de sentir que intento (posiblemente una vez más en vano) huir de nuevo, y puedo hacerlo, aún no sé qué pero sé que puedo hacerlo :-)

I don’t usually go with the flow, so, how come now I’m surprised because I don’t??

Sunday, 3 April 2011

What is reading?

 

Una brillante reflexión acerca de qué es leer. Seguro que aplica a todo tipo de textos y es también parte de la razón por la cual el simple hecho de leer no es ninguna forma mágica que por sí misma y sin más puede cambiar a la sociedad, sino que es un problema por sí mismo que presenta muchas dificultades y tiene numerosos motivos.

Supongo que cuando comencé mis estudios tenía una visión muy poco sofisticada acerca de la lectura; pensaba que leer un texto consistía simplemente en dejar que el texto "hablara por sí  mismo", para revelar el significado inherente en sus palabras. La realidad, como después me di cuenta, es que el significado no es inherente y que los textos no hablan por sí mismos. Si así fuera, entonces todas las personas que leyeran un texto de forma honesta y abierta estarían de acuerdo respecto a su contenido. Pero las interpretaciones de los textos abundan y la gente nunca se pone de acuerdo en lo que un texto significa. (...) Seguramente es porque los textos no son simplemente colecciones de palabras cuyos significados sean obvios para cualquier lector. Los textos tienen que ser interpretados para que tengan sentido. (...) Los textos no revelan sus significados como producto de búsquedas honestas, sino que son interpretados por seres humanos, quienes les dan sentido sólo al explicarlos a la luz de sus conocimientos personales, poniendo las palabras de los textos "en otras palabras". Así que para leer un texto es necesario cambiar un texto.

Ehrman, Bart D. Misquoting Jesus. HarperOne, 2005

(My translation)

Tuesday, 15 March 2011

Misoginia moderna

Cada vez que digo que las fotos de "nenas" en “el Gráfico, el Metro”, en los calendarios o en cualquiera de esas revistas huecas para "caballeros" (¿eh? ¿cuáles "caballeros"? esos ya no existen desde la caída del régimen feudal, jaja), son una forma de misoginia la gente me mira raro, cómo diciendo, "no inventes, si nada más son unas fotos adornando..." ¿Adornando qué? Pues casi cualquier sitio, los talleres, los puestos de periódicos, los anuncios, etc... Y jamás he aceptado que sean "entretenimiento inocente" porque pienso, ¿cómo es posible que el doble estándar de "respetemos a las mujeres" y "gocemos de los cuerpos femeninos porque es lo único que pueden ofrecer" siga subsistiendo? Eso sí que molesta. Primero muestran a las mujeres como objetos y luego dicen que no se explican cómo los hombres las/nos tratan como tales... (Eso sólo demuestra que quienes hacen esas declaraciones are not paying attention!!!) Pues sencillo, si cambiaran la forma en la cual las mujeres son/somos percibidas, realmente verían resultados... Peor aún, desde hace un tiempo, periódicos "populares" (por decir lo menos) acostumbran poner "nenas" sin ropa junto (o a contra página) a fotos de escenas violentas con lujo de sangre... ¿Algo más...? Bendito  libertinaje de expresión…

Aquí un artículo que parece apoyar la idea de que las fotos ardientes provocan (incluso de forma automática) que la imagen de las mujeres sea de objetos sobre los cuales los hombres deben actuar ... 

Sex objects: Pictures shift men's view of women
Monday 16 February 2009 13.42 GMT

Men are more likely to think of women as objects if they have looked at sexy pictures of females beforehand, psychologists said yesterday.

Researchers used brain scans to show that when straight men looked at pictures of women in bikinis, areas of the brain that normally light up in anticipation of using tools, like spanners and screwdrivers, were activated.

Scans of some of the men found that a part of the brain associated with empathy for other people's emotions and wishes shut down after looking at the pictures.

Susan Fiske, a psychologist at Princeton University in New Jersey, said the changes in brain activity suggest sexy images can shift the way men perceive women, turning them from people to interact with, to objects to act upon.

The finding confirms a long-suspected effect of sexy images on the way women are perceived, and one which persists in workplaces and the wider world today, Fiske said.

"When there are sexualised images in the workplace, it's hard for people not to think about their female colleagues in those terms. It spills over from the images to the workplace," she said.

Speaking at the American Association for the Advancement of Science meeting in Chicago yesterday, Fiske said the findings called into question the impact of sexualised images of women that might be pinned on workplace walls or sent around offices where there was a strong locker-room culture.

"I'm not saying there should be censorship, but people need to be aware of the associations people will have in their minds," Fiske said.

In the study, Fiske's team put straight men into an MRI brain scanner and showed them images of either clothed men and women, or more scantily clad men and women. When they took a memory test afterwards, the men best remembered images of bikini-clad women whose heads had been digitally removed.

The brain scans showed that when men saw the images of the women's bodies, activity increased in part of the brain called the premotor cortex, which is involved in urges to take action. The same area lights up before using power tools to do DIY. "It's as if they immediately thought to act on theses bodies," Fiske said.

In the final part of the study, Fiske asked the men to fill in a questionnaire that was used to assess how sexist they were. The brain scans showed that men who scored highest had very little activity in the prefrontal cortex and other brain regions that are involved with understanding another person's feelings and intentions. "They're reacting to these women as if they're not fully human," Fiske said.

Wednesday, 9 February 2011

Malditos Romances o Maldito Tercer Mundo

En realidad ya me había resignado a dejar pasar esto, jaja, pero no sé si es que ya me siento mucho mejor de salud (aún no al 100% pero comparado a como me sentía la semana pasada no me puedo quejar) o qué, pero ahora sí que tengo que ventilar mi ira por no haber sido capaz de ver la película Bright Star. Había estado entre mis pendientes desde hace año y medio y cuando noté que duró en la cartelera comercial sólo dos semanas (y eso en unos cinco cines a lo más), lamenté no unirme ya de plano al equipo "snob/humanista" que es fan de la cineteca (aunque les suena a sorpresa a algunos sólo he ido tres veces: una a ver The Shipping News, otra a ver Paranoid Park con skate incluido y otra a tener una conversación “profunda”).

Según yo estaba  jugando a ser lo menos freak, lo menos snob, lo más mainstream posible con toques de intelectualidad para poder funcionar en el mundo, pero creo que ya de plano tengo que casarme con mi campo, al menos así no me perdería el boletín con cosas interesantísimas y “ de arte” (todas esas etiquetas “indie”, “artsy”, etc., me dan dolor de cabeza porque me parecen elitistas pero chance y no están tan mal, tal vez la no discriminación es mala en ciertas circunstancias…) Lo que fue más curioso fue descubrir que películas como Narnia o Tron siguen en cartelera después de meses... Romances no excesivamente brillantes que parecen más una aplicación al pie de la letra de la teoría literaria, etc., etc., También Social Network continúa cosechando éxitos en la box office (dios bendiga a la enajenación moderna)...

Pero claro, no estoy criticando la selección cinematográfica de la ciudad. En absoluto, negocios son negocios y al público lo que pida, ¿no? Lo que si es que no estaría de más dar opciones, además de las cosas fashion y los romances de a dos pesos. No digo que la película sobre Keats sea buena sólo por su tema, bien puede ser un drama absurdo, un melodrama fácil o tal vez sea una obra de arte, el punto es que ahora no lo sabré... Y tantas otras personas tampoco, sólo porque nunca dan chance de que el público por sí  mismo descubra si hay algo más allá de las cosas de las que todo el mundo habla...

[Se van juntando las películas que hay que ir a buscar por ahí… mmm, y yo que siempre quiero decir “no a la piratería”, pero la alternativa es pagar 500 pesos por un envío internacional…]

Thursday, 27 January 2011

¿La escritura es neutral?

[Notas después de leer The Death of the Author by Roland Barthes. He de decir que no entendí la mitad del texto (jaja.… zut!). Imagine un peu, de haberlo leído en francés, seguro no hubiera entendido el texto completo.    :-P]

"¿Quién habla en cualquier oración dentro de un texto? ¿El protagonista o el narrador? ¿El autor como un individuo de la sociedad? ¿El autor como un autor [es decir, usando las convenciones literarias]? ¿La sabiduría popular/universal [esto sería, la cultura]? Es imposible saberlo. (…)

En la escritura, el "sujeto" [es decir, tanto lo que está siendo dicho o discutido y el individuo que lo dice] están perdidos. La escritura es neutral, la verdadera identidad está perdida, [incluyendo la identidad del texto mismo]. (…)

El darle un autor a un texto es imponerle un límite al texto, cerrar a la escritura. (…) Descubrir al autor es el triunfo de la crítica."

Es verdad que Barthes está escribiendo en un momento de revolución social y por lo tanto en un clima plagado de desconfianza, y supongo que por eso, poco más de treinta años después sus afirmaciones tienen al menos algo de validez. Es verdad que, por mucho que un autor se esfuerce por darle "identidad" a su texto y por "vender" ésta a sus lectores, en realidad entre el autor y el texto se pierden muchas cosas (información, datos, intención, claridad) y entre el texto y los lectores también. Sólo hay que pensar entonces cuánto se ha perdido y distorsionado entre el autor y los lectores... Me parece que ésa es la razón por la cual la Literatura puede estudiarse, porque no estás tratando de saber qué quiso decir el autor, sino qué es lo que se dice en el texto. Curioso, tampoco pareces estar tratando de saber qué es lo que dice el texto, tal vez porque no quieres dotarlo de conciencia ni volición, pero en ese supuesto le quitas su identidad, esto es, todo lo que el autor pudo haber impregnado en el texto mismo.

Supongo también que este "cuestionamiento de la autoridad" es lo que lleva a inferir que hay al menos una forma de comprender el mundo  en donde la conciencia no implica intención. Existen límites per se, influencias externas, "ruido blanco" diríamos, que parecen controlar hasta cierto punto a los seres humanos. Bajo esta perspectiva, no tenemos en realidad "libre albedrío" para elegir qué hacer y cómo entender las cosas... Eso es un alivio de cierta manera, pero también puede ser frustrante, porque incluso el lenguaje, a través del cual pretendemos construir y comunicar nuestra visión del mundo es incapaz de ser 100% fiel a lo que expresa. No voy decir, como Nietzsche, que el lenguaje es incapaz de expresar "la Verdad" (porque eso es algo inexacto y posiblemente inexistente así que da igual si no puede ser expresado), pero sí habrá que aceptar que el lenguaje distorsiona la realidad, tan impregnado que está de ideología. Además, lo decodificamos haciendo uso de herramientas sociales, históricas, etc..., es decir, ideológicas, así que también nuestra lectura se encuentra corrompida... Pero en vista de esto, ¿es realmente neutral la escritura? ¿Puede algo ser verdaderamente neutral? Ni siquiera la misma palabra "neutral" lo es...

 

Addendum:

Aunque sé que no es muy buena idea mezclar diferentes posiciones de crítica o teoría literaria y que la realidad está plagada de paradojas en las que dos o más situaciones contradictorias y excluyentes pueden ser verdaderas o al menos válidas al mismo tiempo, convirtiendo los esfuerzos ecuménicos en un vano ejercicio, después de releer mis notas sobre las teorías de Frye me puse a pensar ¿dónde queda, a la luz de los postulados de Barthes, la afirmación de Frye de que en cualquier texto literario confluyen dos discursos: uno interno, entre los elementos del texto mismo y otro externo, del autor al lector?

Si en un texto literario no habla ni el autor ni el protagonista (sino ambos a la vez pero de forma indiscriminable, además de muchas otras voces más) la posibilidad de existencia de estos dos discursos claramente diferenciados se elimina (de forma lógica, aunque estos discursos parezcan seguir ahí). Si el crítico, o en todo caso el lector es quien re-construye el texto durante la lectura, entonces ¿equivaldría esto a decir que es el lector quien sostiene un diálogo consigo mismo y que es a la vez emisor y receptor de este dialogo que tiene como "pretexto" [no como mensaje, tal vez a lo más como una especie de "objeto"] al texto literario?

Hay que decir, no obstante, que hay muchas cosas que un texto "dice" o que "se dicen en él", que  no podrían saberse si no existiera un diálogo (al menos uno) entre el autor y el lector (como por ejemplo, qué forma tiene el texto, a qué género pertenece, quién es el narrador, cuáles son las situaciones que se cuentan y la actitud del autor ante ellas, etc.). Sin embargo, aún habría que preguntarse si el hecho de que sea el lector quien, haciendo uso de su ideología (esto es, creencias, conocimientos, traumas, experiencias previas de lectura, etc.,) decodifica y (re)construye el texto provoca que efectivamente sea él quien sostenga un diálogo consigo mismo y que las cosas que descubra aparentemente "en y sobre el texto" sean en realidad cosas sobre "el lector mismo". (Esta sería una postura demasiado solipsista como para ser aceptada en un área de estudio seria, tal y como el estudio de la Literatura aspira a ser. En lo personal, yo no la acepto y concuerdo con los enunciados de Barthes sólo hasta cierto punto...)

Sunday, 23 January 2011

Los Dominadores y los Oprimidos

Paulo Freire comienza su Pedagogía del oprimido haciendo referencia a dos conceptos importantes para la educación libertadora: "el miedo a la libertad" y "el peligro de la concienciación". Según Freire, ambos conceptos se conjuntan para construir la idea de que "la concienciación es anárquica" y que si permites que los oprimidos se den cuenta de la realidad (injusta pero situacional) en la que se encuentran inmersos, se provocaría un descontento tal que los llevaría a la revolución violenta y a la barbarie. Siendo una idea tan arraigada, es difícil no pensar que los detractores de la rebelión tengan razón, sin embargo, Freire explica que cuando esto sucede es porque los oprimidos han sido engañados por sus propias percepciones hasta llegar a una percepción equivocada de la realidad; pero que la verdadera "concienciación" no es reaccionaria sino revolucionaria, destinada a cambiar las cosas para la liberación de los hombres (es decir, la humanidad), la cual sería un proceso permanente.

No obstante ¿quién va a liberar a quién? Es obvio, apunta Freire, que los dominadores no tienen ningún interés en liberar a nadie ya que ellos se encuentran atrapados en una visión del mundo en la que "el ser es tener" y claro, para tener más, la consecuencia natural es que muchos tengan menos. El mundo debe ser injusto para que este tipo de sociedad funcione y como a los dominadores les va bien, la educación que ellos imponen o su forma de vida no puede estar encaminada de ninguna forma hacia la liberación.

Freire anota también que los únicos que tienen interés en liberarse son algunos oprimidos, aquellos que ya se han dado cuenta de su realidad y quieren cambiarla, sin embargo, ¿dónde podrían encontrar los elementos que les permitieran tanto conseguir su liberación como las herramientas necesarias para construir una nueva sociedad? Es evidente que no en la sociedad presente, diseñada para oprimir.  Además, hay otro obstáculo a la liberación, pues esta realidad social, que Freire llama masoquista y necrófila (ahora veremos por qué) provoca que tanto oprimidos como dominadores desarrollen percepciones distorsionadas de sí mismos.

En primer lugar, los dominadores no notan que son injustos. ¿Cómo es esto posible? Sencillamente porque la sociedad les ofrece el camino de "la falsa generosidad" esto es, la oportunidad de "dar" sin dar realmente. Programas de apoyo social que no tienen objetivos a largo plazo o que no ayudan en nada a que un futuro los beneficiarios puedan ser independientes y los condenan a una realidad eterna de dependencia son un buen ejemplo de esta "falsa generosidad". No obstante, la educación misma es otro ejemplo. Los dominadores "dan" educación incluso a los oprimidos, pero esta educación es parcial y tendenciosa, tiene por objetivo el "adoctrinar" y "domesticar" a los oprimidos para que puedan "adaptarse" a la realidad de esta relación social vertical. La actitud de los dominadores es “necrófila” porque ellos detestan el cambio, quieren mantener el statu quo benéfico para ellos a toda costa y temen a los cuestionamientos y a  la transformación, al constante devenir que es la vida.

Por otro lado, los oprimidos se encuentran en una situación aún menos halagadora. Ellos no sólo son los que se llevan la peor parte social, económica, política e históricamente, sino que la perpetúan sin saberlo, pues llevan al “dominador” dentro de sí. Los oprimidos no sólo miran a los dominadores desde abajo, sino que admiran su posición y aspiran a llegar a ser como ellos, no para cambiar las cosas y ser más justos, sino simplemente para ser “mejores” y tener la oportunidad de mandar por una vez. (Supongo que casi cualquier “complejo o creencia clasemediera” serviría de ejemplo.) De esta forma, los oprimidos sofocan, incluso antes de que surja, cualquier ansia de cambio y se convierten en simples “beneficiarios” de la “falsa generosidad” de los dominadores. (Ya quedó claro por qué es masoquista, ¿no?)

Cuando los oprimidos muestran disgusto frente a lo que “reciben” de los dominadores, éstos pueden darse el lujo de decir que los oprimidos son unos “salvajes” e “ingratos”. (Más o menos como si un limosnero se negara a comer comida podrida que le han regalado o como cuando nos quejamos de nuestra Universidad y ya tenemos un montón de dedos señalándonos y acusándonos de “inconscientes”, “malagradecidos”, etc., cuando lo único que estamos haciendo es tratar de hacer notar la injusticia, la perpetuación del enfermizo sistema y la necesidad –y posibilidad– de mejora.)

Friday, 14 January 2011

Érase una vez unos homínidos “superiores”…

[Intro] Desde hace casi un año quería escribir algo sobre Lord of the Flies, aunque no sabía qué tan buena idea sería. Sin embargo, después de una conversación remota (gracias a la hightech) de poco más de dos horas al respecto, vi mis ánimos por esta novela renacidos. Estoy casi impresionada de que no sea lectura obligada en nuestras escuelas, pero bueno... etc., etc.,

[Tesis] La premisa inicial de mi comentario será la pregunta que apareció en mí a lo largo de mi lectura, ¿Para qué sirve la cultura, lo intelectual? ¿Sólo para no volvernos locos?

[Context] Como bien se sabe, Lord of the Flies entra en la categoría de "alegoría" sin mucha dificultad, y lo que representa es la lucha de los seres humanos no sólo por superar sus diferencias y tratar de construir una sociedad, sino también los intentos por acomodar todas estas diferencias de forma "civilizada"; es decir, de una manera en la cual los miembros no se sientan reprimidos sino libres pero que tampoco utilicen esta libertad para matarse los unos a los otros. Supongo que no haré mal en decir que ésa es una búsqueda en la que todavía nos encontramos... Preguntas sin respuesta, etc.

[La “carnita”] En Lord of the Flies la cultura y la civilización están representadas por Piggy, un muchachito regordete y enfermizo que no sirve para mucho más que llevar gafas (y cuyo verdadero nombre nunca conocemos aunque sus recuerdos sean los  más vívidos para nosotros). Anteojos que son los que permiten a los muchachos encender una fogata. El conflicto (en un momento claramente de poder) es siempre acerca de si mantener encendido el fuego o no. De mantenerlo, cualquier barco que se acerque podría verlos y rescatarlos, devolverlos a casa. De lo contrario, podrían ocuparse en cazar, comer carne y ensayar intentos de celebración y espiritualidad que terminan en violencia, humillación y asesinato. ¿Suena conocido? Es porque lo es, el narrador (a quien no identifico totalmente con Golding) parece tener una visión unilateral del imperialismo, donde comer iguala a ser un bruto (esto no es de sorprender ya que las alegorías, sean Romances o Ironías, suelen ser unidimensionales o de lo contrario no podrían alcanzar su objetivo). No voy a decir que estoy en contra de esta ‘satisfacción inmediata=brutalidad’, porque a lo largo de mi vida he conocido y odiado a muchos Jacks (Jack era el nombre del chico que quería ser líder porque podía cantar un Do y que representa la crueldad de los instintos desnudos, también, quien, diríamos, simboliza la satisfacción de las necesidades del aquí y el ahora).

Todo va razonablemente "bien" hasta que Ralph, el líder, comienza a demostrar que no tiene muchas dotes para serlo, y es que liderar a un montón de niños asustados por "La Bestia", ansiosos por regresar a casa y más ociosos cada día que pasa sí que es complicado. Ralph confía, sin saber por qué, en lo que dice Piggy y trata de mantener la calma, aferrado a la idea de que es posible que sean rescatados. ¿Será sólo que aceptar que en realidad se encuentran alienados del mundo y necesitan ver cómo vivir así es demasiado para él?

No he hablado aún de Simon, quien simboliza al "profeta" en su sentido más cristiano (aunque Golding siempre se mostró renuente a que se leyera su novela como una alegoría cristiana, pero ¿qué le digo, memoria de Mr. Golding?, once you write something is up for the world to find out what is all about): el profeta no escuchado que termina sacrificado en el momento en el cual trata de contar la verdad que calmaría los ánimos y podría volver a ponerlos bajo el mando de Ralph, quien está escuchando a Piggy, quien siempre (aunque a veces sólo por sus miedos) evitará que caigan en la barbarie. Resulta que, de forma indirecta y en efecto dominó, los profetas son los que salvarían a la humanidad... (uh, ésa sí que no la vi venir :-P). Humanidad representada en Roger, alguien que no es ni “bueno” (como Ralph o Piggy) ni “malo” (como Jack) sino que simplemente se mueve hacia donde soplen los vientos. (Por desgracia, los vientos soplan hacia la barbarie, damn you, enthropy!). Ciertamente: los seres humanos podemos ser "crueles" pero mientras no tengamos la intención de serlo es fácil salvarnos (sólo hay que recordar todas las locuras que hicimos de niños de las que ahora nos arrepentimos); el problema es cuando nuestra violencia es ya con toda intención de destruir la armonía...

Al final y después de varias muertes y torturas, acondicionamientos mentales y miedos supersticiosos, resulta que el líder autonombrado, que lleva el cetro sólo por su fuerza y su coraje queda derrotado sin luchar por el oficial del barco, que, al llegar a tierra pregunta “¿quién es el líder?” y no recibe respuesta. La pregunta es, ¿quién es este adulto? ¿Una versión idealizada de Dios? Es posible y no es posible, porque Simon, el profeta, iba a avisarles que lo que tanto temían, "la bestia" no era una amenaza sino el cadáver de un paracaidista y que “el señor de las moscas” era sólo la brutalidad agitándose dentro de ellos mismos. Así que aunque para suerte de... bueno, varios, los que no murieron, un barco llega y son salvados de la isla jamás sabremos si fueron rescatados de la barbarie.  Por cierto, ¿olvidé decir que estamos en plena Guerra Mundial...?

[Bridge to reality] El conflicto mental aparece cuando tratamos de identificar cada elemento de la alegoría e igualarlo con la realidad (lo que podría parecer una locura y lo es, pero también es parte del concepto literario de "alegoría"). La civilización no tiene como objetivo querer devolvernos a casa o buscar algo más allá, aunque sí cumple -idealmente- la función de alejarnos de la locura y la barbarie. En la novela no cabe duda de que los lentes de Piggy son el símbolo de la civilización y que son primordiales (físicamente era imposible encender el fuego de otra forma), pero en esta realidad, en la que los lentes simbolizan "la intelectualidad" descubrimos que es algo distinto a "la civilización" y que no estamos seguros de por qué es primordial, ¿qué es lo que hacemos con ella? ¿Pensar, sentir, no enloquecer...? Si así es, sería suficiente pero a nosotros no nos los parecería...

[Intertwining, or attempting so] El fuego nos permitió aprender a cocinar nuestra comida, la comida cocinada otorga hasta 50% más de calorías, permitiendo además que nuestro sistema digestivo ahorre poco menos de la mitad de la energía que gastaría en metabolizar la carne cruda. Toda esta energía libre fue lo que entre otras cosas, permitió que nuestro cerebro creciera y pudiera ocuparse en destrezas complejas como "pensar", (pensar cómo cazar eficazmente, por supuesto...) Así que supongo que nuestra historia va más o menos así: "Érase una vez unos homínidos ‘superiores’ que se vieron atrapados en un círculo vicioso de tener hambre-matar-comer-digerir-pensar-matar-tener hambre y entonces encontraron cómo romper el ciclo sin volverse locos, sin morir y, hasta donde ellos creían, sin destruir el círculo entrópico de la naturaleza: tener hambre-matar-comer-digerir-pensar-tener hambre-existir-tener hambre-matar....”

 

Addendum:

Referencia para mis colegas: La fantástica ironía de Golding al incluir un personaje (el más joven, si mal no recuerdo) llamado Percival que repite "My name is Percival... and I live at..." palabras diseñadas para mantenerlo a salvo y regresarlo "mágicamente" a casa, pero que en la isla no funcionan. Curiosamente, cuando tiene que decirle al oficial esa información, resulta que ya se le olvidó… (damn you, memory!) Fantástica ironía porque quién no recuerda la historia del Percival medieval, quien con sólo pronunciar "What ails you?" salvaría el reino del Rey Pescador... Parece ser que lo terrible no es no alcanzar el objetivo, sino que el objetivo haya desaparecido. La verdadera tragedia no es no llegar a la cima, sino que lleguemos a ella, ansiosos por hallar la respuesta y encontremos... Nada... {What kind of God would create a world like that? The sad answer, I guess, is “none”…. Wait, isn’t there a parallel universe in which sad is happy…? ;-)}

Tuesday, 11 January 2011

Reaccionarios/Activistas y el Statu Quo

Creo que en más de una ocasión he expresado mi decepción ante los “reaccionarios” o como los llamamos aquí, “activistas” de izquierda, que sólo señalan y acusan, sin realmente proponer o buscar soluciones. Pareciera que su único placer se halla en aprovechar las teorías paranoicas y conspiratorias como prueba para “denunciar las mentiras” y las “banalidades de la sociedad contemporánea” (como si necesitáramos que alguien nos señalara estos obvios  errores). Lo negativo es que al “escupir su veneno” sólo se ganan detractores y enemigos de entre las personas que deberían compartir sus (esperamos verdaderas) ansias de cambio. Así, la gente que también sufre la opresión y la injusticia de la enfermiza organización de la sociedad no se identifica con las luchas sociales y sólo las censura (y en las discusiones las ataca vigorosamente). Cada quien se queda insertado en una parte distinta del mismo círculo vicioso que se perpetúa (por desgracia parece que) eternamente…

Muchas veces me había preguntado por qué el ser de “izquierda” o mejor dicho, por qué el estar en contra del statu quo o el “establishment” (prefiero la expresión latina porque la inglesa trae el tono de dominación presente que puede herir susceptibilidades); decía, por qué no es suficiente estar en contra del sistema y ver sus fallos para ser parte de la solución; por qué los reaccionarios se quedan atrapados como si no vieran los yerros y permanecen atorados en el mismo statu quo. Aquí va un intento de respuesta, cortesía del pedagogo brasileño más influyente del siglo pasado.

 

[Freire sobre los sectarios de derecha e izquierda, ambos grupos impidiendo el verdadero cambio/la verdadera revolución desde sus trincheras:]

El miedo a la libertad, del que, necesariamente, no tiene conciencia quien lo padece, lo lleva a ver lo que  no existe. (...) Libertad que se confunde con el mantenimiento del statu quo. (…)

           La sectarización es un obstáculo para la emancipación de los hombres. (...) No son pocos los revolucionarios que se transforman en reaccionarios por la sectarización en que se dejan caer, al responder a la sectarización derechista. (...) El sectario, cualquiera que sea la opción que lo orienta, no percibe, no puede percibir o percibe erradamente en su "irracionalidad" cegadora, la dinámica de la realidad.  [Los dos tipos de reaccionarios son:]

            1. Reaccionario de derecha o "sectario de nacimiento". Pretende frenar el proceso de cambio, "domesticar" al tiempo y a los hombres. Pretende "domesticar" el presente para que, en la mejor de las hipótesis, el futuro repita el presente "domesticado". El hoy, ligado al pasado, es algo dado e inmutable  [y beneficioso para él].

           2. Reaccionario de izquierda. Se equivoca totalmente en su interpretación de la "dialéctica" de la realidad, de la historia, dejándose caer en posiciones fundamentalmente fatalistas. Transforma el futuro en algo preestablecido, en una especie de hado, de sino, o destino irremediable: el mañana es algo dado de antemano, inexorablemente prefijado [y malo para él].

           [Esto no quiere decir] que se transformen en espectadores. Por el contrario, cerrándose en un “círculo de seguridad” del cual no pueden salir, ambos establecen su verdad. Verdad que no es aquella de los hombres en la lucha por construir el futuro, corriendo los riesgos propios de esta construcción. No es la verdad de los hombres que luchan y aprenden (…)

           [A ambos grupos de sectarios] les es necesario considerar como una mentira todo lo que no sea su verdad.

           El hombre radical, comprometido con la liberación, no se deja prender en “círculos de seguridad” en los cuales aprisiona también la realidad. Por el contrario, es tanto más radical cuanto más se inserta en esta realidad para, a fin de conocerla mejor, transformarla mejor.

(Freire, Paulo. Pedagogía del oprimido. 1970, 2005.                           Traducción de Jorge Mellado)

 

{Primero de, espero, varios posts sobre Paulo Freire :-)}

Thursday, 6 January 2011

Más Lanzas

Continuando con el tema del post anterior, creo que mi exposición más pareció estar en contra de las Humanidades que de su lado. Sin embargo, he de decir que siempre las defenderé no sólo porque mi formación ha sido predominantemente en estas áreas, sino porque realmente hay habilidades y conocimientos valiosos que pueden obtenerse de su estudio. Lo que no puedo hacer es defenderlas ciegamente, "a capa y a espada", si no por otra cosa porque aspiro a encontrar una solución al dilema de Ciencia Vs Humanidades. (Quizá mi solución sólo me satisfaga a mí y no al Sistema Educativo, pero con eso será suficiente.)

Pensando que estaba sobre en cuáles clases he "aprendido a pensar", creo que no es mentira lo que anoté ayer, aunque tal vez debería agregar Filosofía (pero sólo ciertas clases y gracias a ciertos profesores). No pretendo decir que efectivamente las clases de Filosofía sean imprescindibles per se, sólo digo que algunos tipos de clases, con ciertos contenidos, profesores cuidadosamente elegidos y alumnos receptivos, dispuestos a trabajar para su formación, pueden resultar más que excelentes (de hecho, prácticamente cualquier clase requiere cumplir estos requisitos para resultar efectiva.). No obstante, creo que es importante responder a las acusaciones más comunes en contra de las Humanidades.

a) Se la pasan pensando en ficciones y construcciones mentales arbitrarias que no sirven para nada. Bueno, podríamos decir que hasta cierto punto es verdad, pero también es cierto que el cultivo de lo que se llama "Ciencia pura" también exige y lleva a cabo esta postura, así que no sólo acusaríamos a las Humanidades de estar “desconectadas”. Por otro lado, si somos objetivos y justos, nada "sirve para algo" por sí mismo. Tomemos como ejemplo a la high tech, que unánimemente es alabada como "muy usable"; si no viviéramos en una sociedad consumista o si las investigaciones no hubieran avanzado hasta el punto en el que se encuentran, la tecnología sería inútil.

b) Nunca hay resultados prácticos para la vida. Sí los hay pero por supuesto que son intangibles y difícilmente cuantificables. Los Humanistas debemos responsabilizarnos por difundir las Humanidades (tal y como se difunde la ciencia) y también por buscar aplicaciones prácticas de nuestras teorías. [De cualquier forma, es verdad que no cada punto teórico puede ser aplicable y tampoco requiere serlo para ser válido. En lo que estoy en contra es en que tomemos esta realidad como escudo.]

c) Sus conocimientos no son importantes para la vida o para el trabajo. Aquí de nueva cuenta nos encontramos con querer generalizar una percepción específica parecida a la del punto 1. El que las habilidades y conocimientos otorgados por las Humanidades no sean bien pagadas o siquiera puedan insertarse realmente en la sociedad no es culpa de las Humanidades en sí, sino de la organización de la sociedad, que a través de la historia y en todo momento determinado favorece el cultivo y la inserción de ciertos conocimientos o "carreras".

También podría ir incluso más allá y proponer razones por las cuales las Humanidades no sólo no deben ser borradas del mapa académico sino que deben ser cultivadas y desarrolladas. (En la mayoría de los debates de este tipo la gente involucrada se limita sólo a abrir los ojos bien bien grandes y a gritar a voz en cuello "pero cómo es posible que quieran quitar las Humanidades, la Filosofía, la Historia, si es básica, si sin ellas nos morimos...", o algo parecido, pero pocas veces intentan buscar argumentos razonables y convincentes para apoyar su permanencia).

1. Identificación de signos y lectura de significados. Esta habilidad o capacidad de realizar un procedimiento ya la había señalado como una razón para apoyar el estudio de la Literatura. En esta ocasión, abogo no sólo por la riqueza de las experiencias estéticas de aquellos que adquieran este conocimiento, sino también por una mejora tanto en sus relaciones interpersonales como en su vida laboral. En todo momento y en todo campo es necesario comprender conceptos, ideas, cosas, aislarlas, volver a reconstruirlas, codificar y decodificar mensajes, etc. Más aún, un buen científico o cualquier profesional necesita saber “leer” a diversos niveles y de diferentes formas. Las Humanidades ofrecen ejemplos innumerables para aprender a hacerlo y para poner esta capacidad constantemente a prueba.

2. Claridad de expresión tanto oral como escrita. Si bien es posible desarrollar esta destreza con otros temas, también es cierto que una de las cosas más complejas que existe es preparar una respuesta escrita frente a un objeto estético, (tal vez sea por su misma naturaleza intangible y vaporosa o por lo espinoso de sus temas, los más profundos/absurdos de la humanidad). El pensar algo al respecto de un texto, pintura, etc., y después presentarlo por escrito no es tan sencillo como parece (reto a cualquiera que esté en desacuerdo a intentarlo y decirme cómo le fue) y obliga a abstraer, organizar, sistematizar y ordenar, no sólo datos o información, sino a codificar un mensaje ya sea con el fin de informar, convencer, persuadir o mostrar odio diplomáticamente (porque por supuesto que no porque sean grandes mentes estamos de acuerdo con todos los autores, artistas, músicos, filósofos o pensadores,).

3. Historia de las ideas. Quién no se ha preguntado de dónde viene tal o cuál expresión o pensamiento. Más importante aún, quien no ha necesitado saber de dónde vienen sus más arraigados prejuicios o creencias, no sólo para interactuar con ellos sino también para defenderse en las discusiones. Asimismo, conocer la historia, no sólo los hechos, sino también las interpretaciones y pensamientos de diferentes personas a través del tiempo nos enseña a ser un poco más humildes y a observar métodos de razonamiento en acción, algo de lo que todos nos podemos beneficiar.

4. Imaginación y Creatividad. No voy a argumentar que el Arte no pone reglas y que la Ciencia nos reprime, porque estoy consciente de que la Ciencia es una de las actividades más creativas de la humanidad; lo que anotaré es que los seres humanos tenemos una multitud de necesidades espirituales, emocionales o cognitivas que no pueden ser resueltas a través de los métodos más racionales. El aumento de los problemas y de las falsas soluciones de la sociedad está enraizado en nuestra incapacidad de darle rienda suelta a nuestras dudas y necesidades de expresión en formas adecuadas. Creo que fue Picasso quien escribió que “todos los seres humanos nacemos artistas, el problema es cómo seguir siéndolo al crecer”. Bueno, el cultivo de las Humanidades ofrece una verdadera válvula de escape para insertar todos esos "intangibles" y construir más conocimiento.

5. Empatía. Acabo de leer a S. J. Gould diciendo que "la lucha de las mujeres es la lucha de todos", y yo podría agregar que "todas las luchas son de todos", ¿cómo aprenderemos a ver las cosas desde otro punto de vista sino a través de la Historia y la Ficción, ni se diga de la Filosofía? Para redondear esta idea señalaré que "mirar las cosas desde otras perspectivas" es básico para los estudios científicos de todo tipo.

6. Las cosas por su nombre. Me refiero no sólo al vocabulario sino al hacer uso del lenguaje a diversos niveles en miríadas de experiencias sociales. No nada más con el fin de "sonar fancy" sino también para utilizar formas creativas y efectivas de conformar nuestras frases y nuestras expresiones al construir nuestra concepción del mundo (al fin y al cabo ése es el fin de un lenguaje).

7. Laboratorios Sociales. Las humanidades ofrecen representaciones de seres humanos en acción, ya sea directamente (a través de ficciones o crónicas históricas) o indirectamente (mediante las reconstrucciones de procesos reflexivos). Este conocimiento acerca de nosotros mismos y de nuestra propia conciencia no sólo sirve de entretenimiento sino que también podría convertirse en una herramienta para el cambio y el progreso.

Pues bien, estos siete puntos resumen algunas cosas, pero en cuanto recuerde más las anotaré. Nada mejor que tenerlos a la mano para cuando se necesiten y qué mejor que tomar notas de forma clara y en un ejercicio de persuasión para avivar a la memoria… (Ah… pues, punto 8…. jajaja)

 

Addendum:

He de anotar también que los puntos anteriores no están encaminados de ningún modo a justificar los estrechos e hiperespecializados trabajo, cultivo y desarrollo que se llevan a cabo actualmente en la mayoría de las áreas de Humanidades. Creo que una educación integral es esencial (y no me cansaré de repetirlo). Las Humanidades no pueden ser valiosas a menos que se encuentren en constante retroalimentación con el resto de los campos de conocimiento y también con la cotidianeidad. En definitiva, no hay rama que sea independiente y lo más importante, los seres humanos necesitamos un "justo medio" en la cantidad y cualidad de nuestros conocimientos y experiencias.

Wednesday, 5 January 2011

Rompiendo lanzas por las Humanidades

[Abstract:] En el (ahora ya) antiguo debate entre las humanidades/artes y las ciencias naturales/sociales/económicas/etc., no creo que los contadores tengan toda la culpa del recorte de presupuesto a las primeras. No sólo diré esto, sino que también agregaré que señalar a los "malditos cerdos capitalistas" como responsables del poco crecimiento e ínfimo interés en cultivar las artes/humanidades es una posición simplista que no sólo no ayuda a nadie, sino que sólo cumple el objetivo de darle la oportunidad a las personas de mostrarse "completamente preocupadas y comprometidas" con el desarrollo de estas ramas del conocimiento humano. [Si tantas personas que dicen estar preocupadas porque se quiera borrar a las artes liberales y a las humanidades de los programas estuvieran realmente interesadas en ellas, ¿por qué no se arriesgaron a cultivarlas ellas mismas cursando una licenciatura en una de éstas áreas? {“No, pues no nos dejemos llevar...”} :-P] (Y si esto último sonó a un vil ad hominem, no fue mi intención, es una pregunta real, no retórica…)

Este tema se me ocurrió al leer un artículo de la revista Nature en el que se argumentaba a favor de dar mayor importancia y dinero a las universidades dedicadas al cultivo de las humanidades/artes (curiosamente el autor no hace diferencia al respecto y creo que dividir estas dos áreas es primordial para atacar el problema, pero bueno, por el momento podemos unirlas bajo una denominación). Citaré algunos fragmentos que me parecieron interesantes y estimularon mis reflexiones:

I learned to think critically, analyse deeply and write clearly in my university humanities courses, not in my science courses. I found humanities the most valuable subjects in school. They still broaden my thinking, help me to make connections and aid my ability to communicate.

Esto es seguro una hipérbole, o de plano he de concluir que las clases de Humanidades en los países de primer mundo deben ser diametralmente opuestas a las de esta cara de la moneda (lo que es posible y probable). Creo que en este país nadie diría que las humanidades fueron las materias más valiosas en la escuela. Jamás. Las humanidades aquí son para llenar el tiempo y darle trabajo a los egresados (lamentablemente así es, aceptémoslo). De vez en cuando hay buenos profesores que realmente te ayudan a ensanchar tus horizontes y a desarrollar tus capacidades cognitivas, pero son los menos y no podemos dejarles la carga total. Las clases en las que yo aprendí a pensar fueron mayormente las de ciencias (sobre todo las que más odio: matemáticas, física y química; pero también en las de biología) porque me obligaban a mirar las cosas cotidianas desde otra perspectiva, además me enseñaron a ser disciplinada y sistemática en mis ideas. Incluso ahora, cuando estoy en una mala racha utilizo el cálculo mental para despertar a mi cerebro y a mis neurotransmisores, e indirectamente las endorfinas salvan un poco de mi cordura.

Students have neither the wisdom nor the experience to know what they need to know. Left to themselves, they frequently choose subjects based on the fashion of the moment (which in the United States is currently economics, although at one time it was sociology) or on what they think will equip them best for a job. That the best and most valuable education combines breadth with depth is something that most students do not yet understand. We need less student choice, not more. We need more prescribed curricula, not less.

Bueno, muchos estudiantes sí que no tienen idea de lo que necesitan saber. Como el 70% o más de los estudiantes universitarios viven así, pero eso es porque tampoco tienen idea de muchas otras cosas, ni siquiera de lo más básico... Sin embargo, creo que, al menos en nuestro país, tener curricula opcional es algo que debería intentarse seriamente. No sólo porque aquí escoges una carrera y ya te casaste con un sólo grupo de conocimiento por el resto de tu vida académica y profesional, sino también porque las facultades están llenas de vicios y vacas sagradas que evitan que tengas al menos 3 maestros buenos y 3 malos por semestre... Además, no entiendo qué quiere decir el autor cuando implica que las artes y humanidades podrían equipar a los estudiantes para un trabajo (y no es porque no haya entendido lo que leí...). Siendo honestos por un momento, lo que se saca de las humanidades es siempre mínimo y no por culpa de las humanidades por sí mismas sino porque nunca se va más allá, a trabajar con los temas y con las habilidades. Si los estudiantes no se esfuerzan por exprimir su cerebro no importa qué estudien, nunca estarán preparados. (De los profes, mejor ni hablar... ellos ya saben cuál es su trabajo...) Por otro lado, creo que los estudiantes tenemos derecho a exigir lo que queremos estudiar, los profesores deben guiarnos para compensar nuestra falta de "conocimiento y experiencia" pero no deben elegir por completo, porque, al fin y al cabo, somos nosotros los que tenemos que sufrir con una vida de carencias educativas.

El artículo completo puede ser leído aquí (para que quede como prueba que no fui malintencionada y que no saqué las citas de contexto.) Debo añadir que me quedé de a seis con ese cuasi insulto de "bean counters". Creí que estábamos hablando en serio y ya ponemos a los contadores a la defensiva... (como si no lo estuvieran de por sí.)

Como decía antes, el texto sirvió de punto de partida para varias reflexiones mías. En primer lugar, no creo que la solución sea considerar a las universidades como "receptáculos" que protegen el conocimiento de antaño. Creo que el problema comienza precisamente por eso, porque pareciera que los humanistas creen que lo único que tienen que hacer es cuidar a sus vaquitas y ya con eso cumplieron. Con esa ocupación justifican su trabajo, su sueldo y su falta de resultados o beneficios tanto para el mundo como en el campo de los conocimientos (en general, no sólo de humanidades). En segundo lugar, seguro que sí importa quién dirige las universidades, pero si bien no deberían estar regidas ni por cerdos capitalistas ni por familiares de políticos, creo que tampoco deberían estar regidos por un humanista, porque seguro que van a querer "echar de reversa la balanza" y "acarrear agua a su molino un ratito...", con eso de que "una de cal por las que van de arena..." Además, si los humanistas de otros países son como los nuestros (que no han estudiado a conciencia ni administración ni pedagogía, ni educación y son especialistas en 15 líneas de una obra escrita hace 300 años), no pues... "a buen árbol nos arrimamos..." {Perdón por tantos dichos, pero es una forma de sacar la ira constructivamente, manteniendo viva una de nuestras "grandes tradiciones"...}

Para salvar a las humanidades es necesario (y lo he dicho varias veces) comprender qué hacen y porqué son importantes, cuantificar y cualificar lo que ofrecen a la sociedad, sólo así entenderemos porqué son imprescindibles. Esto requiere que los humanistas se bajen (nos bajemos) de nuestra nube de “yo he leído muchos libros” y comencemos por buscar conceptos unificadores, resultados, teorías que nos expliquen nuestras áreas de conocimiento pero que también puedan ser trasladadas a otros campos de conocimiento y que marquen diferencia en la vida de los ciudadanos de a pie. También será necesario dividir a este grupo de “estudios etéreos” en algo así como: Humanidades, Ciencias Sociales, Ciencias Liberales, Artes (y a éstas en el estudio de las Artes y en la producción de ellas). Me parece que cada vez me gusta más la idea de que todos los universitarios deberíamos tomar cursos varios, no sólo de nuestra carrera, sino de Ciencias, Apreciación Estética, Apreciación Artística (no, no es lo mismo), Economía, Psicología, etc., porque al fin y al cabo todas esas ramas surgieron porque son importantes para la sociedad y, como miembros de ella, todos deberíamos ser capaces si no ya de cultivarlas, sí al menos de disfrutarlas, comprenderlas y hacer uso de ellas…

Tuesday, 4 January 2011

"The world is [not] a stage and all the men and women are [not] merely players..."

Me duele discrepar de Shakespeare, Spenser, Horacio, etc., etc., pero esta vez no puedo estar de acuerdo. (Mentira, me da un poco de gusto tener diferencias con las grandes mentes del pasado pues eso puede significar dos cosas, o que el mundo sí ha cambiado radicalmente a través del tiempo o que ahora estamos viendo las cosas desde otra perspectiva. Ambas situaciones son esperanzadoras.)

Si el mundo es un escenario entonces la vida es una obra y si los hombres y las mujeres no somos sino actores, entonces representamos un personaje. El problema es que las acciones y actitudes de un personaje están supeditadas y decididas por la naturaleza de la obra misma (si es una tragedia o una comedia, o una tragicomedia o un melodrama, u otra cosa) así como por la función que el personaje tiene en la obra (héroe o villano, protagonista, dama en discordia, obstáculo social, comic relief, helper, etc.) y es entonces cuando no estoy de acuerdo en que se “esperen” ciertas cosas de nosotros y que no podamos decidir quiénes somos y qué hacemos.

La sociedad ha cambiado, sin duda, pero no tanto como para “reinventarse” a sí misma, (lo que es una pena y espero que suceda pronto, o ya de menos, en algún momento de la historia), los roles siguen estando dados, dependiendo de si se es hombre o mujer, joven, viejo, “profesionista” o “profesional”, jefe o empleado, padre o hijo, alumno o maestro, o para usar la nomenclatura de Freire (fascinante aún si socialista) “oprimido” u “opresor”. Y cuando a uno se le asigna su “papel” en el mundo, parece ser que no queda más que desempeñarlo de la mejor manera, lo que por supuesto da lugar no sólo a tener que olvidarse de uno mismo y de las ideas propias sino también hacerse la pregunta (un poco absurda, en el mejor de los casos) de “pero, ¿qué es lo que se espera de mí?” (Contestemos con otra pregunta, “pero, ¿quién espera de ti?”)

Desde que las guerras mundiales trastocaron el orden doméstico de roles de género (gracias a…, pues… no puedo decir que a Dios, ¿verdad?, ni tampoco que “gracias a la guerra”… así que… bueno, sólo digamos que fue algo positivo…) el concepto de mujer como una “actriz completa” (para seguir usando nuestra metáfora) comenzó a aceptarse como una realidad. Por desgracia, la sociedad sigue preguntándose (sin sentido): ¿entonces que harán ahora los hombres, qué papel les toca…? Y últimamente parece ser algo rentable proponer imágenes del “hombre de hoy”, porque, if men are merely players, somebody’s got to tell them what to do… right?

Lo mismo sucede en algunas otras áreas, no siempre dicotómicas: profesiones, edades, etc., cualquier etiqueta que pasó de ser una descripción útil para controlar la información de la sociedad a un límite o a un checklist (no sé qué opción es peor).

Esa idea del “mundo es un escenario” esconde otro peligro al convertirse en una forma de “lavarnos las manos” y deslindar responsabilidades, ya “no soy yo, sino mi papel, mi rol…” Otra instancia de la característica inmadurez de la modernidad: muchísima conciencia y autocrítica pero nada de responsabilidad, nada de “yo decido y acepto las consecuencias”. (Llamémosle “self-indulgent conscience”.)

Sin duda aún podríamos argumentar que la vida sí impone circunstancias ajenas a nuestro control, tal y como un dramaturgo coloca a sus personajes en un mundo hostil o amable según le plazca o funcione a sus objetivos, pero, como no podemos asegurar que existe tal autor hay que decir que efectivamente vivimos en un universo con límites que señalan pero no coartan.

A lo que quiero llegar es que no hay porqué vernos como actores representando nuestro papel, sino a personas viviendo, decidiendo hacer o dejar de hacer, para bien o para mal y aún si el libre albedrío fuera un mito, podemos movernos en varias direcciones y no sólo para cumplir las expectativas de la audiencia…

Monday, 13 December 2010

“al Infinito pero no más allá” o Porqué el Nec Plus Ultra es sólo un Ideal cíclico y por lo tanto, inalcanzable

Tengo una cierta afición por la publicidad, afortunadamente mucho menor que hace unos tres lustros, no sé si porque ya encuentro aburrido el engaño que persigue o porque los de Marketing cada vez se esfuerzan menos y en lugar de hacer gala de su "creatividad" sólo llenan el tiempo que les asignan en los medios, gastándose el presupuesto que también les asignaron... Por suerte, y con eso de que todo está “in the eye of the beholder” de vez en cuando los ads a veces detonan reflexiones.

Hace unos días vi el comercial de la nueva LG Infinia, y aunque no tengo ni idea de lo último en tecnología televisiva (y en realidad me da igual, jaja) le puse bastante atención con eso de que en el ad una voz en off empieza diciendo algo así como “¿Por qué nos gusta ver la tv?” y concluye (o presenta la respuesta con cara de conclusión) que es para “alejarnos de la realidad”. Si es así, me pregunto, ¿entonces por qué tanto interés en convertir la experiencia audiovisual en lo más parecida posible a la realidad? ¿Cómo el crearnos una mimesis de la realidad, que aspira a tener todas las características -3d, alta resolución, historias de la vida real, sonido surround- que nos engañarían por completo nos permitiría alejarnos de ella? Lo más curioso/irónico es que mientras más “realista” la ficción, más artificial…

Como parece, las ficciones no están para alejarnos de la realidad, sino para mostrarnos una imagen distorsionada de ella que resulta más agradable y por tanto más llevadera. Se convierten en la única forma en la que podemos insertarnos en la “realidad” (o en lo que consideramos como tal), para vivir inmersos en ella (algo sobre que debemos aceptar y aprender a hacer, pues es inherente a nuestra existencia). Sólo creyendo que efectivamente somos capaces de “controlar” algunos aspectos de ésta (ya de menos el volumen), podemos decir que necesitamos alejarnos de la realidad, aunque, a decir verdad jamás estuvimos más cerca de ella.

 

 

Addendum:

A fin de cuentas, si todo el universo fuera parte del argumento de una película o una novela, apuesto a que la audiencia sentiría algo de compasión ante nuestra situación. Aunque ¿cómo tendría que ser su realidad para que no fuera parecida a la nuestra  y su compasión viviera dentro y fuera de ellos…?

Thursday, 2 December 2010

Diablos, cómo no se me ocurrió primero… jaja

Desde hace meses que quería publicar esto, jaja, pero la verdad se me había olvidado (tache para mí). Los vasos de la cadena de cafés “Cielito Querido”, que desde hace un rato han estado sustituyendo a los Cafe Caffee y a los Coffee Factory, al menos en algunas plazas comerciales (esta foto es de parque delta, aunque ya hay también en pabellón cuahtemoc y creo en pabellón del valle) y afuera de los cinemex… Bastante gracioso y provocador ;)  porque todos conocemos los (mucho menos que excelentes) productos y (engañosos/fancy) tamaños del Starbucks…

DSC00068

Respecto a la calidad del café y a su sabor no tengo ni idea, ya que yo casi no tomo café.. jajaja. Lo que sí es que esta cadena se anuncia ofreciendo “café 100% mexicano”, y su decoración entre retro y pintorescamente mexicana es agradable. Los precios… pues parecidos a los de otras cadenas, ni qué decir, supongo que otra cosa sería “competencia desleal”.

Wednesday, 1 December 2010

List of Unsolved Problems in Philosophy (CC Óscar)

Thanks to Oscar I run into this "list of unsolved problems in philosophy" (though the first problem I encountered was to decide what the concept of "philosophy” the editors had used, since there are problems related to the theory of art, language or mathematics. Yet I easily ruled out that conflict, saying that philosophy refers widely to "problems attaining knowledge” though, what is knowledge and how does it differ from, say, beliefs or know-hows? this question being as ancient as knowledge itself and having studied it during a whole semester in high school  without getting a satisfactory answer I pretty much laughed it away… hahaha). Even if I really don’t know why Óscar directed me there it was a great reading, I suppose that now I don’t feel like the only one who has unsolved dead-ends. Here are the problems I found more fascinating (in the order they appear in the article, not mine):

 

Essentialism - Well, just three weeks ago I was asking myself whether I "knew" something only because of my intrinsic ability of "knowing" or because of the things' inherent capacity of "being"... I think this goes with Gettier Problem as well.

The Medium is the Message - Sure, for example, I prefer rockabilly or indie/brit versions of pop songs rather than pop songs themselves... (hahaha just joking, I know this problem is way wider... but it is a cool example, isn't it?)

Art Objects (Sorites Paradox) - This one is plain mesmerizing, I was thinking about this very same problem the other day: sometimes while I'm singing scales or playing something on the violin a note is slightly "off", then I ask myself, "so, this ain't a D right?" and I answer to myself, "sure, it is a D slightly lower”, and I continue, “therefore it isn't a D, because if it were a D, it would be sharper..., but, how is it that I can use a D as a reference, there has to be something there…"

Mind-Body Problem - My opinions on this subject vary widely (depending on my mood, my current readings, or my state of mind), in any case, I really don't buy Descartes' arguments, I mean, surely I can say that I can imagine my mind without my body, but it is obvious I cannot say I actually did it, since the part of my body that allows me to have a mind is working properly and that's why I can imagine things. Also, I can surely picture a meeting without me (my funeral, for one) but that doesn't mean that I really believe that a meeting without me is impossible. (A marginal note: the latter example is, to my knowledge, Freud’s, not Descartes', so people at Wikipedia should look it up...)

Hard problem of consciousness and Qualia - I put these two under the same label because in my opinion they are closely related. That quality of perception we name "qualia" is explained through consciousness, and it is perhaps the only thing that remains unsolved regarding perception, so we have to accept that consciousness exists even if we cannot explain how it works. Nevertheless, I remain confident that further research will solve this riddle sooner than later... Neurological research has grown enormously in recent years, and sure they will find if there is something "not material" to consciousness, or only a matter of "consciousness is just a way of refering to a skill, capacity or ability founded on the grounds of material stuff, just as a smile is a way of refering to a certain behavior of the mouth, which, in turn, is a way of refering to teeth, lips and such, not another thing in itself…"

Demarcation problem - A problem that the guys at UNAM’s Philosophy Department should take seriously… I suppose Kant and Comte would be delighted if they knew how far we’ve come: just more questions and no answers... hahaha. (I have never read Popper in my entire life so I can't say I agree or disagree with his views). However, this one is perhaps just a problem of modern obsession with objectivity and perception ("modern" in the wider sense, from Enlightenment on, because I basically regard Renaissance as a Middle Ages' hangover, yeah I know if I said it out loud I would be accused of "laity", but I don't care...). If it is, or it isn't, I think if we were able to "demarcate" what is what and why, we could find better (that is, more suited or appropriate) methods to research on every field and, more importantly, to produce respectable knowledge.

 

So, this really was relaxing, I pretty much forgot about my own problems, doubts and sadness… Now they are back…I better leave and try to find another way of distracting them :D

Sunday, 28 November 2010

En Defensa del Romance

{En medio de este mundo tan extraño en el cual todo se mezcla y todo se aplica indiscriminadamente pensé ¿por qué no he de dar yo también my two cents en estos estudios postmodernos? Debo decir que, así como he mostrado mi desacuerdo ante las ideas de mis profesores, también ahora he de decir que mi maestro está en el camino correcto al decir que el estudio de la literatura fomenta el conocimiento para “leer signos”, una habilidad que es imprescindible en la vida diaria, en todos los campos y en todas las situaciones. Por cierto, el hecho de que mientras mejor leas signos más completa será tu experiencia estética al consumir cualquier obra –ya sea una novela, un poema, una serie de tv, una película, una pintura, etc.- podría ser lo que, en última instancia justificaría la permanencia del estudio de la literatura en todos los programas de estudio… wow, una idea que sin duda hay que perseguir, pasar por pruebas de validez, y poner a prueba en la práctica…} 

[“Romance” hereafter refers to a particular literary form which enacts a conflict between good and evil, and which in many cases includes a quest or a series of tasks. It is not related at all to love or to the 19th century artistic/ideologic movement known as Romanticism, although a lot of “romantic” works were written during this period.]

Intro o ¿quién dijo que los romances pasaron de moda? Borges escribió (y mis profesores seguro estarán de acuerdo) que a los modernos no les gustaban los romances, i.e. esas historias de "caballería" en donde un "héroe" debe completar un sinnúmero de pruebas y al final quedarse no sólo con el premio a su valentía sino también con la chica (i.e. “get the money and get the girl” :D). La primera vez que escuché la cita me sentí tentada a estar de acuerdo, pero on closer look, debo decir que parece posible desafiar esa opinión tan erudita a la luz de algunos ejemplos. Es decir, los ratings, las ganancias y las ventas millonarias de Narnia, La Brújula Dorada, Lord of the Rings, Harry Potter, Ga'Hoole, Avatar (the cartoon series and also the movie), películas tipo El Último Samurai, El Último Maestro del Aire o Matrix parecen demostrar que a los contemporáneos no sólo nos gustan, sino que nos encantan los romances, vivimos para los romances, y soñamos con ser "el elegido", y salvar al mundo al menos una vez, ganar sabiduría, crecer como seres humanos, y claro, pues también robarnos el corazón de alguien en el proceso. De entre todos los romances que llenan las librerías y las salas de cine hay (unos mejores que otros, jaja) desde los más claramente cristianos-neoplatónicos (Matrix) hasta los más alegóricos y crípticos (Ga'Hoole), en algunos la caballería está presente como un elemento central (Lord of the Rings) y en otros mucho más velada (Narnia) [Por supuesto los ejemplos abundan, hasta comics/películas más alejadas de la tradición del romance como Scott Pilgrim o Watchmen tienen fuertes elementos de esta corriente literaria/ideológica…]. El conflicto es la constante, la búsqueda casi solitaria y sufrida, los amigos que compensan los defectos del héroe o la heroína, el mal representado en los villanos caricaturescos y lo que hay que salvar, sea un reino, un grupo de creencias, un mundo, una persona, etc., las “pruebas” que poco a poco se van complicando hasta llegar al “torneo final”, etc.

{Otro “train of thought” de porqué los romances “pegan tanto” es que tratamos de reconciliarnos con las incongruencias en la representación cristiana del Mesías, y en nuestro intento por compensar esa imagen y completarla de una forma no sólo más lógica, sino también más conveniente para nuestras creencias,  los romances que disfrutamos tienen fuertes matices cristianos mezclados con un sinnúmero de ideas paganas. Hay que tomar en cuenta que la idea de Cristo fue sólo la versión más rentable del dios que muere y renace que ya estaba presente no sólo en las mitologías griegas y celtas, sino también en los ritos persas y egipcios más antiguos e incluso en corrientes orientales como las del “iluminado”.}

{Qué y Por Qué} El romance, según la opinión literaria tradicional, es la forma que presenta en su expresión más pura "el sueño del total cumplimiento de los deseos". En una historia de este tipo encontramos claramente un background formado por valores y actitudes que nos permiten juzgar las acciones de todos los personajes. No nos cabe duda quién es el héroe y quién el villano (aún si podemos justificarlo o comprenderlo sentimos que es “malo”), y por eso mismo nos relacionamos emocionalmente con el primero, lo que contribuye a que, una vez conseguido el éxito, los lectores o espectadores disfrutemos por un segundo "la epifanía de las expectativas colmadas". Los ideales que defendemos, las cosas que creemos importantes son preservados por el héroe, y todos los obstáculos que amenazan la consecución de esta sociedad cuasi-utópica que imaginamos perfecta se encuentran materializados en los villanos. Y a pesar de que esta parcialidad creativa es lo que más contribuye al éxito de los romances quizá sea también la que nos hace censurarlos. Hay algo que no parece funcionar, tanto idealismo los hace "ridículos", "falsos", "infantiles". Y por supuesto que hay algo de todo eso en los romances, después de todo ¿qué se puede esperar de un "sueño" y del "total cumplimiento de los deseos"? No obstante, cada generación necesita sus romances característicos, porque mal que bien todos creemos en un cierto grupo de ideas y despreciamos otros, en otras palabras, siempre hay un conflicto latente entre "lo que debería ser" y "lo que es". Este conflicto, a mi parecer, es mucho más profundo que el conflicto cómico entre "los viejos y los jóvenes", porque involucra los verdaderos motivos que guían nuestras acciones diarias a escala social y no meramente la búsqueda individual de identidad que nos “obliga” a “rebelarnos” contra todos los “errores” de la generación precedente. De este modo, al mirar detenidamente los romances que una generación aprueba y hace suyos, podría descubrirse cuáles son los atributos que para ese grupo es importante (honestidad, amistad, valentía, puede ser casi cualquier cosa) y cuáles son las características que más censura y busca evitar (tiranía, violencia, etc).

Y aún con todo, el romance sigue relacionándose con los cuentos de hadas y se sigue despreciando, se le mira como a una forma menos "seria" que la tragedia o incluso que la comedia, ya ni se diga que la ironía, la cual, por alguna razón, (supongo que el jugar a ser "muy inteligentes y ver más allá de lo evidente" nos gusta a todos, jaja, no, no es cierto, seguro el “desencanto” es lo que está detrás de nuestra elección, curiosamente el “desencanto” es también lo que nos lleva  hacia el romance), la ironía, decía, se ha convertido en la marca distintiva de la modernidad. Por ello es que los autores cada vez se tienen que ver más brillantes y creativos para disfrazar lo idealizado del romance y presentarlo de un modo inteligente, original, fresco y que permita un enlace honesto y sólido con la audiencia. De cualquier modo, aún con todo este diestro maquillaje, los rasgos distintivos del romance no son difíciles de identificar para un ojo entrenado (o en proceso de entrenamiento, como es mi caso).

En lo personal este tipo de historias ejercen un poder casi hipnótico (mucho más de lo que mi “science-focused mind” quiere aceptar), así que cuando la teoría de los Mythos de Frye me permitió acercarme a descubrir cuál es la verdadera razón de que me encanten y cómo es que funcionan estas historias mesiánicas simplemente no me pude resistir. (Espero poder mostrar mis resultados en mi experimento a la Berkeley…  Stay tuned… :D )

{Ahora sí que debo aceptarlo, la teoría y crítica literaria pueden aumentar el disfrute que produce el consumo de ciertas obras… Me equivocaba al decir que las humanidades “no servían para nada”… El error nunca supo tan dulce… :-P}